Con mucho ánimo y cargados de energía salimos a correr, montamos en bicicleta, jugamos partidos de fútbol, vamos al gimnasio a echar unos bailes en cualquier actividad colectiva o entrenamos con la idea de cumplir unos objetivos. La sociedad de hoy poco a poco se va concienciando de la importancia de hacer deporte, ya no sólo como una obligación, si no como un hobby o actividad competitiva que nos motiva.
El deporte diario no sólo afecta a nuestro físico, sino que condiciona nuestro estado de ánimo, activa nuestro cuerpo y libera stress. Es una actividad que nos une, un encuentro social divertido y saludable. Aun así, ¿está nuestro cuerpo preparado para rendir al máximo? Nadie quiere ser el primero en decir, "ya no aguanto más" o quedarse en el banquillo mirando. Una buena alimentación es primordial para alcanzar esos 10 kilómetros más, o conseguir aguantar hasta el final del partido, pero un buen descanso es indispensable si queremos llegar a la meta.
El rendimiento físico de nuestro cuerpo está estrechamente relacionado con el estado de nuestro equipo de descanso y en la Asociación Internacional de productos para dormir (ISPA), llevaron a cabo un estudio para afianzar está afirmación.
En 1979 nación un nuevo departamento en el ISPA, el Better Sleep Council (BSC), y desde entonces ha estado encargado de la educación al consumidor sobre la importancia del sueño para tener una vida saludable. Entre sus trabajadores destaca el Doctor Jacobson, quien en 2008 publicó un estudio acerca de cómo la calidad del descanso y las horas de sueño afectan al rendimiento físico de una persona.
“La falta de sueño nos impacta físicamente, y puede afectar negativamente nuestra coordinación motriz, nuestra agilidad, nuestro estado de ánimo y nuestra energía”, cita el Dr. Jacobson.
En su estudio titulado Grouped Comparisons of Sleep Quality for New and Personal Bedding Systems, (comparaciones grupales de calidad del sueño para nuevos equipos de descanso) el buen doctor relaciona el rendimiento físico de una persona con la edad y calidad del colchón donde descansa.
La siguiente tabla expone los resultados del estudio aplicados a correr, hacer pesas y realizar ejercicios aeróbicos.
Actividad | Colchón más Nuevo | Colchón más Viejo |
Correr | 59% | 6% |
Pesas | 54% | 8% |
Aeróbicos | 57% | 9% |
A su vez los sujetos del estudio demostraron que, una vez cambiado el colchón por uno nuevo, las condiciones relacionadas con el rendimiento físico mejoraban considerablemente.
Por ejemplo:
- El dolor de espalda se reduce en un 62,8 %
- El dolor de hombros se reduce en un 62,4 %
- La rigidez de espalda se reduce en un 58,4 %
- La calidad del sueño mejora en un 64,4 %
- La comodidad al dormir aumenta en un 69,6 %
Si para realizar deporte nos equipamos del mejor calzado y ropa deportiva, ¿por qué no nos equipamos con el mejor descanso? Desde Splendor te recomendamos los colchones ORION o HIDRA, equipados con tratamiento e-balance®. Dicho tratamiento ayuda a mejorar la circulación sanguínea y a conseguir un estado de equilibrio energético mientras descansas y te recargas para dar el máximo mañana.
